El Aveiro Rossio Hostel se encuentra en el centro de la ciudad y es un hostel que ha sido decorado con esmero y acierto. En él puedes encontrar muebles super modernos y de repente sentarte en una silla que ha sido restaurada para disfrute de los visitantes. Tiene todo lo que se necesita cuando vas a alojarte a algún alojamiento de este tipo, cocina, comedor, salón en el que poder entablar conversaciones con otros inquilinos, patio en el que poder fumarte un cigarrillo sentado en un puff, baños (uno de ellos adaptado para minusválidos) y, como no, las habitaciones.
Éstas son de varios tipos, podemos encontrar desde una doble privada con baño por 28 € noche y persona, hasta una para 8 personas con baño compartido por 16 € noche y persona. Las habitaciones grandes no hace falta que las ocupes completas ya que así tienes la opción de compartir habitación con otros inquilinos. Una cosa que yo nunca había visto en un hostel son las taquillas con enchufes dentro, las taquillas son unos cajones que se encuentran debajo de las literas, bastante amplias por cierto, en las que han metido una regleta para poder dejar cargando lo que quieras sin la preocupación de que te la puedan quitar (cosa que no es probable ya que la gente que va a estos sitios no va a robar porque se exponen a que a ellos también les quiten las cosas y nadie piensa en ese tipo de actuaciones).
El desayuno que sirven es bastante completito y está incluido en el precio de la habitación. Aparte del desayuno, este hostel organiza de vez en cuando cenas en las que se puede apuntar quien quiera, éstas por lo general, salen por unos 7 - 8 € y suponen otra oportunidad interesante para poder conocer a gente.
A mi lo que más me gustó de este hostel fue la cocina, no vas a echar de menos nada ya que está muy bien equipada con todos los instrumentos de cocina que puedas necesitar a la hora de prepararte tu las comidas (dato importante si no quieres que el viaje te salga demasiado caro). Nosotros cuando fuimos la utilizamos bastante. Un dato importante es que tiene tanto micoondas como horno por lo que sino quieres currarte mucho la comida y con unas pizzas estais servidos, es perfecta.
La zona de aparcamiento es bastante amplia por lo que no vas a tener que dejar el coche lejos y al ser el centro de la ciudad, tienes muchos restaurantes por la zona en los que poder degustar las comidas típicas de la zona (os recomiendo el arroz caldoso de marisco, para chuparse los dedos). La zona de bares se encuentra a menos de 3 minutos andando en una plaza muy cercana al hostel, pero no por ésto es un sitio ruidoso en el que no poder descansar.
Una cosa importante que te ofrece este hostel es el servicio de internet gratis con dos ordenadores a disposición de los inquilinos. Aparte de estos dos ordenadores tienes wifi para poder conectarte con tu ordenador.
Y para terminar esta entrada no puedo olvidarme de las personas que allí trabajan. Hicieron que nuestra estancia allí fuese muy fácil ya que nos dieron información sobre todo lo que les preguntábamos y encima nos proponían cosas nuevas que poder hacer. Hablaban español perfectamente por lo que el idioma tampoco fue ningún problema aqui.
Os dejo unas fotitos para que seais vosotros los que opineis ahora.
Salón
Cocina
Habitación en la que nos alojamos nosotros
Espero que os haya gustado
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